Abby Voss
Nube saltarina
Wilma es una nube joven y enérgica que no para de dar saltos. Sus movimientos frenéticos molestan a las demás nubes del cielo y a los pájaros. ¿Será capaz de encontrar un espacio donde ser ella misma?
Érase una vez un diablillo que vivÃa en el bosque, cerca de un pueblo. La gente le llamaba “La Cosa” porque era pequeño y feo. Construyó una cabaña para vivir que solo tenÃa una estrecha habitación. No habÃa cocina, solo una lumbre en el centro. En lugar de chimenea, habÃa un agujero en el tejado de paja. El diablillo preferÃa cocinar en el
—¡Estoy segura de que es un brujo! —susurraban las mujeres entre sÃ, para que el diablillo no pudiera oÃr ni, primero Dios, maldecir a nadie. Los hombres no le hacÃan mucho caso, pero tampoco dejaban que sus hijos jugaran cerca del bosque, por precaución.
Una primavera, el viento destruyó algunas casas de la
—Tenemos que sacarlo de aquà —acordaron los hombres. Pero nadie estaba dispuesto a adentrarse en el bosque. Solo se arriesgaban a ir allà cuando tenÃan que hacerlo: para recoger leña o frutas y setas silvestres. Y siempre se mantenÃan en los lÃmites del bosque.
El diablillo tampoco se aventuraba en ir al pueblo. Cultivaba todo lo que necesitaba en un pequeño campo detrás de su cabaña.
Pero el destino quiso que un dÃa todo cambiara. Una mañana temprano, un padre y su hija fueron al bosque a recoger