Esta es una antigua leyenda de una hermosa chica de México. Se llamaba Xanath. Además de hermosa, pertenecÃa a una familia muy rica. VivÃa en un palacio maravilloso y, sÃ, podÃa obtener absolutamente todo en el mundo. Sin embargo, hay cosas en la vida que el dinero no puede comprar. No es posible tenerlas ni por la fuerza.
Un dÃa soleado, Xanath decidió salir a pasear. Los pájaros cantaban alegremente y las abejas obreras zumbaban. Todos estos sonidos la llevaron a un parque cercano, donde conoció a un joven llamado Tzarahuin.
Era un joven encantador, pero por desgracia su familia era pobre. VivÃa con sus padres en una vieja cabaña de madera cerca del bosque. Pero, como todos sabemos, el amor verdadero no distingue entre pobres y ricos. En cuanto sus miradas se cruzaron, se enamoraron en el mismo instante.
Después de eso, cada dÃa Xanath inventaba diversas excusas para huir y encontrar a su amado Tzarahuin en algún lugar escondido. Pero cuanto más los amantes se encontraban, más deseaban estar juntos. Pero Xanath sabÃa muy bien que sus padres nunca le permitirÃan casarse con alguien pobre. Asà que no tuvieron más remedio que seguir viéndose en secreto.
Un dÃa, Xanath salió de nuevo en busca de su amado Tzarahuin. Pasó por delante de un enorme templo, caminando con una sonrisa de felicidad en la cara y tarareando una alegre melodÃa. De repente, uno de los dioses que vivÃan en el templo la vio. Impresionado por su belleza, se enamoró de la muchacha inmediatamente.
Era el dios de la fortuna y solo de verla decidió que Xanath deberÃa ser su esposa. Corrió tras la chica y consiguió alcanzarla aunque Xanath intentó escapar de él. Sin dudar un minuto, le pidió a la bella…